Se utiliza como un beneficio terapéutico, entre ellos tenemos:
A. Uso Acupuntural: El láser reemplaza el uso de las agujas de acupuntura (excepto la zona alrededor de los ojos sobre glándulas de secreción interna, donde el láser está contraindicado), tonificando o dispersando, utilizando frecuencias bajas o altas respectivamente.
La energía absorbida actúa de dos formas:
1. Estimulando la liberación de sustancias preformadas (autocoides), como son las histaminas, serotoninas, branquininas, etc.
2. Modificando las reacciones enzimáticas normales; tanto en un sentido de excitación como de inhibición.
B. Aceleración del metabolismo celular:
La radiación láser ejerce un estímulo en la producción de ATP en el interior de las células, originando y provocando la aceleración de la mitosis, hecho que se produce cuando hay aumento proporcional de ATP y de las mitocondrias. La acción terapéutica del láser actúa sobre la movilidad iónica.
C. Incremento de la troficidad Celular:
Una de las principales consecuencias de la irradiación láser sobre una zona es que esta aumenta la troficidad de las células, de los tejidos y de los órganos.
También se utiliza, para: La acción antiálgica, efecto antiinflamatorio, antiedematoso y normalizador circulatorio, reconstrucción del tejido conectivo y reepitelización, efecto anti-infeccioso, efecto general biorregulador y limpieza de piel. En la medicina natural el láser se utiliza básicamente para: laserpuntura, laserterapia, laser cirugía, entre otros.